jueves, 26 de mayo de 2011

MAÑANA COMIENZA LA NOVENA DE LA HERMANDAD DEL ROCÍO DE DAROAL; Mañana domingo día 29 de mayo a partir de las seis de la tarde comienza en la Real Parroquia de Santa Marina la anual y Solemne Novena en honor de Nuestra Señora del Rocío, titular de la más que borrascosa, Pontificia, Antigua, Fervorosa, Augusta, Imperial, Real y Alegre Hermandad de Nuestra Señora del Rocío y Santa Librada de la ciudad de Daroal, tercera en el orden de las filiales de Almonte por su fundación (año 1749), y última desde el pasado año por faltar a la romería de 2010 debido al secuestro de la desalmada folclórica Pepa Alcores, actualmente ingresada en el Hospital de Inocentes de Nuestra Señora de Belén. Tras la novena, que finalizará el lunes día 6 de junio, tendrá lugar la Procesión del Simpecado hasta la carreta en la que hará el camino (que este año será la de madera tallada y dorada), y a las cinco de la mañana del martes día 7 iniciará su peregrinación hacia la aldea almonteña. El embarque de carretas y peregrinos en la playa de San Pablo está previsto para la una de la tarde y el desembarque en Ayamonte sobre las diez de la noche. Una vez en tierra la hermandad seguirá por el camino de Punta Umbría hacia la aldea de El Rocío, a donde llegará cual tsunami el sábado día 11 sobre las nueve de la noche y, por culpa de la majadera visueña, hará su presentación ante la Hermandad Matriz en el último lugar tras la Hermandad de Pozuelo de Alarcón. El milagroso Simpecado de la hermandad daroaliana es de terciopelo rojo bordado en oro por Domingo Navarro en 1767 y la carreta que utilizará este año (de las dos que posee) será la realizada por Juan de Astorga en 1810, recuperada recientemente tras su restauración en el IDPH. Cien carretas de bueyes, ocho mil caballistas y más de diez mil peregrinos la acompañarán (esperemos que sin incidentes) inundando todo el camino de devoción y alegría hasta las plantas de la Pastora almonteña. El regreso de las carretas tendrá lugar en la tarde del sábado día 18 de junio.

VIVA LA VIRGEN DEL ROCÍO! VIVA LA HERMANDAD DE DAROAL!

"El Simpecado que a todos gana, es el que llevan los de Triana, que mira prima a mí me da igual, yo hago el camino con Daroal..."

sábado, 21 de mayo de 2011

CRÓNICA DE LA SEMANA SANTA DE DAROAL 2011 (VII); Domingo de Resurrección. El último día de la Semana Santa daroaliana constituye una auténtica explosión de luz y color en la que desfilan multitud de pasos alegóricos o que representan diferentes pasajes de la vida de Jesucristo (el Niño Perdido en el Templo, la Transfiguración, Jesús y la Samaritana, la Tentación en el Desierto), la mayoría pertenecientes a cofradías de penitencia; Santos principales de la Iglesia relacionados o no con la Pasión (Elías, Isaías, San Juan Evangelista, Santiago, San Pedro, Santa María Magdalena, la Verónica, etc.), que hoy desfilan en solitario; misterios alusivos a la Resurrección (la propia Resurrección Gloriosa de Nuestro Señor, la Aparición a la Magdalena, la Aparición a los Apóstoles, la Aparición en el Lago Tiberiades, la Cena de Emaús); las Figuras Bíblicas y por último las imágenes de Nuestra Señora en sus advocaciones de Gloria (Alegría, Inmaculada Concepción, Asunción, etc.) Todas las hermandades tienen este día recorrido oficial por las calles: Sol, Templo, Plaza Real, Alcuceros y Plaza de Venecia, pero no Estación de Penitencia a la Catedral pues están constituídas como Hermandades de Gloria. Aunque todos los pasos e imágenes son de gran interés y mérito artístico (como los del resto de la semana), sin duda lo más llamativo del Domingo de Resurrección daroaliano es el cortejo de las Figuras Bíblicas que, con más de 600 integrantes representaron personajes bíblicos del Antíguo y Nuevo Testamento como apóstoles, evangelistas, profetas, sibilas, judíos, soldados romanos, sayones, etc. y acompañaron a las procesiones componiendo vistosas escenas y espectaculares cortejos, que de nuevo apasionaron a todo el público que los contempló con fervor, y que lograron su máximo lucimiento a su paso por todo lo largo y ancho de la calle de los Alcuceros hasta la Tribuna de autoridades de la Plaza de Venecia.

Las primeras figuras bíblicas tienen su orígen en las procesiones de Daroal a finales del siglo XVI, creciendo notablemente durante todo el siglo XVII hasta mediados del XVIII. Todas pertenecen a Corporaciones Bíblicas que a su vez pertenecen a diferentes Cofradías, y su atuendo lo componen: el rostrillo (careta de cartón piedra y escayola pintada, de faz arcáica y muy convencional con expresión grave, trágica o grotesca -según el personaje-), la vestimenta (de terciopelos, sedas, oro y plata y cueros) y el martirio (atributo alusivo al personaje o pasaje que representa). La mayoría de los rostrillos y vestimentas datan de mediados y finales del siglo XIX, aunque también se conservan algunos muy ricos y costosos -profusamente bordados- del siglo XVIII, todos usándose en la actualidad. En el caso de los martirios procesionan numerosos atributos barrocos de los siglos XVII y XVIII, así como del siglo XIX y princípios del XX. FIGURAS DEL ANTÍGUO TESTAMENTO: 1. Adán y Eva. 2. El Arca de Noé. 3. El Pentatéuco. 4. El Arca de la Alianza. 5. Los Libertadores de Israel. 6. Los Patriarcas de Israel. 7. Los Fundadores de Israel. 8. Los Levitas. 9. El Clan de Quehat. 10. La Destrucción de Sodoma. 11. Los Babilonios. 12. Los Jueces de Israel. 13. La Historia de Saúl. 14. Los Pecados de David. 15. El Juício de Salomón. 16. Los Reyes de Israel y Judá. 17. El Reinado de Josafat. 18. El Reinado de Yoás. 19. El Reinado de Yehú. 20. La Salvación de Jonás. 21. la Reconstrucción de Jesrusalén. 22. La Historia de Tobías. 23. El Reinado de Esther. 24. Los Defensores de Israel. 25. Los Hermanos Macabeos. 26. Los Profetas. FIGURAS DEL NUEVO TESTAMENTO: 27. Simón Cirineo y El Pregonero de la Sentencia. 28. Los Ataos (Barrabás, Dimas y Gestas). 29. Judas, Pedro y Pablo. 30. Soldados y Centurión. 31. Los Apóstoles. 32. Los Evangelistas. 33. Las Parábolas de Jesús. 34. Las Tentaciones de Jesús. 35. Las Profecías de Jesús. 36. La Transfiguración de Jesús. 37. Los Milagros de Jesús. 38. El Centurión. 39. Los Samaritanos. 40. La Resurrección de Lázaro. 41. Los Doctores de la Ley. 42. Las Sectas Judáicas. 43. Los Discípulos de Enaús. 44. Judith y La Degollación de San Juan Bautista. 45. El Pretorio Romano. 46. Las Autoridades Judáicas de Jerusalén. 47. Los Testigos Falsos. 48. El Prendimiento de Jesús. 49. La Turba. 50. El Imperio Romano. 51. Los Judíos de Azote. 52. Los Defensores de Jesús. 53. Los Mitigadores de Jesús. 54. Los Santos Varones. 55. Las Tres Marías. 56. El Fariseo y El Publicano. 57. El Sudario de Cristo. 58. Las Apariciones de Jesús. 59. Los Siete Diáconos. ALEGORÍAS Y SÍMBOLOS DE LA RELIGIÓN: 60. Los Fundadores del Templo. 61. Los Dones del Espíritu Santo. 62. Las Potencias del Alma. 63. Las Virtudes Teologales. 64. Las Virtudes Cardinales y La Sibila de Cumas. 65. Las Virtudes Morales. 66. Paz, Conciencia y Bondad. 67. Las Postrimerías del Hombre y Los Enemigos del Alma. 68. El Judío Errante e Ismael. 69. El Demonio y La Muerte.

En la imagen una fotografía de la Corporación del Imperio Romano, minutos antes de iniciar su procesión con la Real Archicofradía del Dulce Nombre de Jesús y Nuestra Señora de la Alegría, desde la iglesia del Hospital de San Quintín.

jueves, 19 de mayo de 2011

CRÓNICA DE LA SEMANA SANTA DE DAROAL 2011 (VI); Sábado Santo y Domingo de Resurrección (I). La última etapa de la Semana Santa daroaliana es la de los pasos alegóricos y los grandes desfiles bíblicos con representaciones del Antíguo y Nuevo Testamento, donde figuran personajes clave de la Pasión como el emperador Tiberio, el gobernador de Judea Poncio Pilato, el tetrarca de Galilea Herodes Antipas, o los sumos sacerdotes Anás y Caifás; entre los cortejos más vistosos se encuentran el de la corte de Herodías con el baile de Salomé tras el paso de la Degollación de San Juan y el de la danza de la Serpiente ante el de la Tentación de Cristo en el Desierto; los misterios de la Transfiguración del Señor con Moisés y Elías, Jesús con la Samaritana junto al Pozo de Jacob, el Sol Eclipsado y el del Cordero Inmolado (Jesús muerto sobre un caballo blanco, guiado por las Virtudes Teologales representadas por la Virgen, las Tres Marías, San Juan y los Santos Varones), son de las representaciones alegóricas más logradas de la jornada del Domingo. Entre las paradas de soldados romanos del Sábado Santo figuran la espectacular comitiva de las Legiones Romanas (con infantería de línea, infantería ligera, caballería y artillería) tras el paso de Los Durmientes y las imponentes Guardia de Tiberio, la Corte de Roma y el Imperio Romano que escoltan a parte de los más de diez pasos de Jesús en el Santo Sepulcro que procesionan este día en Daroal, casi todos seguidos por el paso de Nuestra Señora al pié de la Santa Cruz, caso de las Cofradías de la Soledad y Santo Entierro (San Antonio), Santo Entierro y Nuestra Señora de las Fiebres (San Eduardo), Traspaso y Santo Entierro (San Ildefonso), Soledad y Santo Sepulcro (Imperio Romano), Preciosa Sangre y Siete Dolores (Guardia de Tiberio), Soledad y Quinta Angustia y Santo Entierro (los Durmientes), Cristo Yacente y Soledad (Santa Catalina), Dulce Nombre y Nuestra Señora de Regina, Piedad y Santo Entierro (San Francisco), Sepulcro y Soledad del Puente, Cristo Amortajado y Desconsuelo y Soledad (Novia), Cristo de la Caja y Nuestra Señora del Consuelo (Corte de Roma), Cofradía de la Santa Cruz Desnuda y Nuestra Señora de la Estrella y Cofradía del Cristo de la Acedía y Nuestra Señora de la Palma o Confortación (San Juan Nepomuceno). En cuanto a la imaginería, las hermandades del Sábado Santo daroaliano constituyen un catálogo artístico dificilmente superable en todo el orbe cristiano; además de las citadas esculturas de Cristo Yacente (entre las que se encuentran obras de Pablo de Rojas, Gregorio Fernández, Juan de Mesa, Francisco de Villegas, Luisa Roldan, Fernando Ortíz, Francisco Fermín, José Tomás de Cirartegui, Francisco Salzillo, etc.), procesionan otras obras maestras como el Cristo de la Clemencia (Martínez Montañés 1603), Cristo de la Buena Muerte (Pedro de Mena h.1666), o el Santo Cristo de la Laguna (obra de autor anónimo del siglo XVI). Del tema de la Piedad (la Virgen sosteniendo el cadáver de Cristo), encontramos ejemplos como el de la Cofradía de la Santa Cruz Desnuda y Nuestra Señora de los Desamparados (Ramón Álvarez (1879), Cofradía de Nuestra Señora de la Alcobilla (autor anónimo, atribuida a José de Mora h.1665), Cofradía de las Angustias y Penas de Nuestra Señora Reina de los Ángeles (José Esteve Bonet 1795), Cofradía de Nuestra Señora de las Angustias y Santo Cristo de la Misericordia (Torcuato Ruíz del Peral h.1750), o la Cofradía de la Piedad de San Bartolomé (Francisco Salzillo 1763). Igualmente encontramos una excelente y nutrida representación de la iconografía de la Virgen de la Soledad al pié de la Santa Cruz: Nuestra Señora de la Palma o de la Confortación (Francesco Verzella 1835), Nuestra Señora del Consuelo (Francisco Salzillo 1755), Nuestra Señora de los Dolores o del Traspaso (Luís Salvador Carmona 1759), Nuestra Señora de la Estrella (Gabriel Astorga 1851), Nuestra Señora del Desconsuelo y Soledad - la novia- (autor anónimo de finales del siglo XVI), Amarguras y Tristezas de Nuestra Señora de Belén (autor anónimo del siglo XVII), Mayor Dolor de Nuestra Señora de la Soledad (autor anónimo de finales del siglo XVII o comienzos del XVIII, atribuida a José de Mora), Soledad y Quinta Angustia (autor anónimo del siglo XVII, atribuida a Pedro de Mena), Siete Dolores de Nuestra Señora (Juan Prieto 1719), Soledad del Sepulcro (autor anónimo del siglo XVII, de escuela granadina), Soledad del Puente (autor anónimo del siglo XVIII, atribuida a Pedro Asensio de la Cerda), y la devotísima Soledad de San Antonio, obra de autor anónimo del siglo XVIII.

En la imagen una fotografía de Nuestra Señora de la Soledad y Quinta Angustia, de la popular Archicofradía de los Durmientes, que realizó con gran solemnidad su estación a la Santa Iglesia Catedral en el trigésimo lugar del incomparable Sábado Santo daroaliano.

martes, 17 de mayo de 2011

CRÓNICA DE LA SEMANA SANTA DE DAROAL 2011 (V); Viernes Santo (tarde). Muy poco tiempo después de la Cofradía del Sevillano llegó a la carrera oficial la primera de las dieciséis hermandades de la tarde del Viernes Santo daroaliano, la del Cristo de los Milagros y Nuestra Señora de la Parra, cuyo espléndido conjunto formado por el característico canasto del siglo XVIII que representa un Belén lleno de casas y figuritas, sobre el que se levanta un alto risco de plantas y flores y por último las imágenes de la Virgen arrodillada a los pies del Señor (obras de autor anónimo de la segunda mitad del siglo XVII), de nuevo fascinó a los cofrades y a todos los visitantes que estos días se encuentran en nuestra ciudad. El Cristo de la Expiración y la Virgen de la Perla, de la Archicofradía de los Negros, inundaron de saetas el señero barrio de la Cestería, llegándose a contar hasta 23 cuando el Cristo regresaba a Santa María por la calle Culebra. La Cofradía del Cristo del Suplicio y Nuestra Señora del Buen Aire cumplió todas las expectativas cuando, a su regreso por la orilla de la playa de San Pablo, la ola (que este año lucía medalla y lacito de la hermandad y aguardaba ansiosa y firme desde el atardecer) se tragó integramente y con más ganas que nunca el paso de la Virgen de los Navegantes ante la bella estampa de la oscura noche daroaliana al borde del mar, solamente iluminada por la luna llena y las luces de los nazarenos, y al son de las marchas fúnebres de la banda de música "La Giralda", que también formó parte del menú. A bombo y platillo como ninguna, precedida de un Escuadrón de Caballería de la Guardia Jalifiana de Daroal, y escoltada por la Centuria Romana de la hermandad, desfiló solemne por todo su recorrido la Real Archicofradía de la Sagrada Mortaja, que entró rodeada de fieles por los callejones del barrio de Santa Marina pasadas las cuatro de la mañana. El colofón del día lo puso la Imperial Archicofradía de Nuestra Señora de Villaviciosa (obra de autor anónimo h. 1711), radiante y sola a los pies de la Santa Cruz sobre su paso de plata mejicana del siglo XVIII, con devota estación en el Hospital de los Mozárabes (nada más salir de la catedral) e impresionante discurrir por una melancólica y lóbrega calle Molineros.

En la imagen una fotografía del Santo Cristo del Mandato o de la Sangre (obra maestra de Nicolás de Bussy de 1693), que salió junto a la Virgen de San Lorenzo en decimotercero lugar desde el Convento de San Basilio.

miércoles, 11 de mayo de 2011

"CHAROPADILLISMO" Reflexionaba yo en mis crónicas de la Semana Santa de Daroal de 2011 sobre el fenómeno "charopadillista" y sus perjudiciales efectos sobre la semana santa sevillana, cuando ha llegado a mis manos este sincero y sentido artículo de Rafael Ríos, hermano de la Bofetá, que ha escrito en su blog "El Niño frito", para contestar a un artículo escrito en ABC por Fran López de Paz (naturalmente escondido tras de su seudónimo habitual) en el que se rie de todos los hermanos de la Bofetá, y para venirme a confirmar que no he sido el único en observar cuán nociva es esta mafia creciente de pseudo-comunicadores con micro a pié de zanco, que se permiten el lujo de opinar ante una concurrencia que no les ha pedido opinión, y que por cojones nos quieren vender una semana santa que nada tiene que ver ni con Sevilla ni con los sevillanos.

Os presento a continuación el artículo completo de Rafael (que confieso me ha llegado al alma), encabezado por la mejor fotografía que se me ocurre para acompañar a esta "pandilla".

"ME FALTAN LOS ADJETIVOS... Para poder calificarte. Podría decirte perrerías, llamarte necio, tonto o imbécil en cualquiera de sus acepciones, pero sería perder el tiempo inmisericordemente con un personaje como tú. Tú, que te has aprovechado de la posibilidad de tener acceso a un micro; tú, que como tantos "abrazafarolas" has aprovechado la coyuntura para escalar en tu trabajo; tú, que has creado un pseudo subgénero periodístico, el del "amarillismo cofrade", ¿vienes ahora a reirte de mi hermandad y de los mios?

Años, muchos años, llevas lanzando mierda por tu boquita a través de ese altavoz con forma de martillo que un día te encontrastes, dando informaciones sesgadas o medio verdades sobre mi Hermandad, contando solo lo que a tí te interesaba, pero todo tiene un límite. No me pidas que no me duela, porque me duele hasta lo más profundo de mis entrañas. No me pidas que no vocifere, porque ya estoy cansado de cuatro payasos que, como tú, os habréis creído que la Semana Santa es otra cosa muy distinta a lo que la mayoría de los cofrades hemos mamado en nuestras casas.

¡Qué sabrás tú lo que es el "estilo Bofetá"! ¿Acaso el mismo estilo que permitió que en el año 2003 fuera la primera cofradía en pisar la Campana, mientras todos los que ahora empozoñáis alababais nuestra valentía? Qué sabrás tú de la mirada de Jesús Ante Anás o del sabor de las lágrimas que desprenden los bellos ojos de mi Virgen del Dulce Nombre. ¿Acaso te has acercado alguna vez por San Lorenzo para conocer cuales son los sentimientos de los hermanos de la Bofetá? Posiblemente no, pasarías de largo para ir al encuentro de la que quedó en Soledad al pié de la Cruz, sin reparar que antes hay otra capilla en la que también los hermanos le rezan a sus titulares.

¡Qué sabrás tú de banquetas azules, de la "tiara de Anás", de las blancas túnicas de hilo gallego, de las talegas numeradas, de Martín Arévalo y de Curro "el capiller", de Lolina y Enrique y los bocadillos del Horno de San Lorenzo, de Agustín Muñoz Pérez y D. Manuel Filpo, siempre impecablemente vestido presidiendo el banco de su Hermandad!

¡Qué sabrás tú de Juan Pérez Calvo, que cogió una Hermandad después de la Guerra Civil con poco más de 100 hermanos, y la llevó al esplendor del que hoy goza! ¿Que la Bofetá tiene una Gestora? Y qué, como antes la tuvieron la Candelaria y las Siete Palabras, Montesión y Santa Cruz, y así tantas más. Son ciclos que pasan que entre todos, los bofeteros, intentaremos salvar como sepamos o podamos, pero no poniendo constantemente zancadillas.

Risa, tus palabras en el ABC del pasado domingo me producen risa. Y enojo, porque uno se cansa siempre de lo mismo. Tú que eres hermano de la "Valiente", la misma que no hace tantos años he visto yo "huevear" en el puente de Triana cayéndole la mundial, ¿vienes a rasgarte las vestiduras con mi hermandad? Se puede ser más falso e hipócrita. Pero sobre todo, se puede ser más cobarde, de firmar siempre bajo un pseudónimo sin dar jamás la cara, aunque todos sepamos quien se esconde detrás de la firma.

Se que este escrito no llegará a ningún sitio, no le doy tanta importancia ami humilde blog. Todos harán piña en torno a ti y me tacharán de loco por criticarte, pero no me importa. Seguro que ni se te ha pasado por la cabeza pedir perdón a los hermanos de la Bofetá que nos hemos sentido muy ofendidos con tus palabras.

Solo te ruego una cosa, olvídate de mi Hermandad, tanto para lo bueno como para lo malo y recuerda que, como dice el refrán "antes de señalar a nadie con el dedo, recuerda que tres dedos te señalan a ti".

martes, 10 de mayo de 2011

CRÓNICA DE LA SEMANA SANTA DE DAROAL 2011 (IV); La Madrugá (II). En el octavo lugar de las cofradías de la madrugada y mañana del Viernes Santo daroaliano figura la de la Santa Cruz de Jerusalén, que salió al amanecer desde el Convento de María Santísima de la Concepción en Su Asunción a los Cielos con gran acompañamiento de hermanos de luz (portando hachones) y de disciplina o de penitencia, diferenciados según prescriben sus estatutos, además de una nutrida representación conventual. Digno de contemplación fue como siempre el regreso de los pasos por las feligresías de San Francisco y Santa María Magdalena a donde, además de la catedral y en medio de un gran silencio y devoción solo roto por las capillas de canto y la banda que seguía a la Virgen de la Concepción con San Juan (obras de Cristóbal Ramos -1752-), realiza estación esta antigua cofradía. Siguió la nómina subiendo el tono fervoroso la popular Archicofradía del Santo Ecce Homo (soberbia escultura de Luisa Roldán -1684-) y Nuestra Señora de Triana (Juan de Astorga -1816-) acompañada de San Juan y la Magdalena (obras de autor anónimo del siglo XVIII) bajo rico palio de terciopelo negro con grandes bordados de oro, que salió del Convento de San Laureano. Y como culmen de tan sublime ensueño las tres hermandades que cierran la jornada (las tres de rompe y rasga): la del Rescate y Nuestra Señora de la Esperanza, cofradía santo y seña del embriagador, castizo y popularísimo barrio de la Trinidad, y cuyo paso por el pontecillo de la Trinidad y por las grandes bodegas del barrio son una de las más bellas estampas de nuestra semana mayor. La del Santo Cristo de los Tormentos (Francisco Antonio Gijón -1682-) y Nuestra Señora de Debla (autor anónimo -siglo XVIII- atribuida a José Montes de Oca) que salió entre fogatas y bulería desde el barrio gitano de San Bernardo, y cuyo paso por el célebre Café de Silverio al final de la calle Trono, fue como siempre cita obligada para los mejores cantaores de la ciudad. Y como broche de oro la Real Archicofradía del Sevillano, con el imponente misterio de Jesús Nazareno en su encuentro con las Santas Mujeres en la Calle de la Amargura y la Virgen de los Dolores o de la Estrella, que entró en medio de una gran muchedumbre en su Capilla de San Telmo hacia las cuatro de la tarde. En la imagen una fotografía de la devotisima Virgen de Debla (la Virgen Gitana), protagonista de uno de los momentos más emocionantes de la mañana del Viernes Santo cuando, por la cuesta que lleva su nombre, sube San Mateo hacia la cava de los gitanos.

lunes, 9 de mayo de 2011

FERIA DE DAROAL; Ayer domingo día 8 de mayo tuvo lugar la tradicional Feria de Daroal con el siguiente orden de actos: a las doce de la mañana montaje de casetas. A las tres de la tarde comida en el real. De cuatro a ocho de la tarde paseo de caballos. A las diez de la noche pescaito frito. A las doce de la noche alumbrado de portada y farolillos. A la una de la madrugada castillo de fuegos de colores y cierre. En la imagen una fotografía del alegre paseo de caballos por las calles del real daroaliano.

lunes, 2 de mayo de 2011

CRÓNICA DE LA SEMANA SANTA DE DAROAL 2011 (III); La Madrugá (I). Bien distinta es la madrugada del Viernes Santo daroaliano de la que se celebra en otros lugares muy conocidos. Aquí en Daroal, todas las cofradías (incluidas las de la madrugada) salen en procesión para cumplir la Estación de Penitencia como mandan sus reglas a la Santa Iglesia Catedral, y no a formalizar con esa especie de circo mediático en el que se ha convertido el inicio de la carrera oficial de algunos sitios, que tanto interesa a los hambrientos de coreografía de corneta y martillo. Doce cofradías realizan durante la madrugada y la mañana del Viernes Santo su estación a la catedral. Entre ellas se encuentran algunas de de las más renombradas y antíguas. La primera es la del Santo Cristo de las Tres Caídas y Nuestra Señora del Desamparo (la de los Mulatos), que salió de la iglesia de Omnium Sanctorum desde su barrio del Trabuco, el "Harlem" daroaliano, con sus empinadas cuestas, sus callejones quebrados y mal empedrados y sus características hogueras que, como cada año, esta noche se multiplicaron hasta que la cofradía regresó al barrio rodeada del siempre variopinto cuadro trabuquero (vecinos, perros, mulas, gallinas, etc.) . Del Convento de los Terceros salió la cofradía del Jesús de la Pasión y Nuestra Señora del Camino. El Señor de Martínez Montañés caminó ayudado por el cirineo de Juan de Mesa sobre su clásico paso de Juan Rossy tallado en 1865 y alumbrando con sus esbeltos candelabros las viejas fachadas de la calle Molineros. Tras Él, la Virgen del Camino desfiló solemne sobre su paso también de corte decimonónico presidido por una representación de la Jefatura de Estado de la siempre enemiga Estrella de la Sierra, por compartir advocación con su Patrona. En tercer lugar figura la cofradía del Cristo del Perdón y Nuestra Señora de la Paloma, la Madre de todos los daroalianos. Digna de mención es siempre la sublime bajada de la Virgen por la Cuesta de los Cuchilleros (esta noche adornada con luces que la cruzan de fachada a fachada), límite geográfico entre el barrio del Pópulo y el resto de la ciudad. También su paso por la Plaza Real (donde toda la familia real en pleno -Príncipe Miguelín a la cabeza- preside esta noche la tribuna principal) significa todo un acto de estado para la Corona de Daroal. La vuelta de la cofradía por la mañana volvió a congregar a miles de fieles que un año más alfombraron de devoción las principales calles del Pópulo (Mesones, Espíritu Santo, Cebolla, Paloma), siendo su punto álgido la llegada al Café de Madrid donde folclóricas, cantaores, autoridades, nobleza y pueblo (al más puro estilo Berlanga) se funden un colosal abrazo hacia la Virgencita de nieve y de plata, antes de la apoteósica entrada en su pequeña Basílica. Siguieron las cofradías del Traspaso de María Santísima y Nuestro Padre Jesús del Gran Poder, y la del Cristo del Amor y Madre de Dios del Socorro con San Juan que, con sus soberbias efigies del insigne Juan de Mesa y sus esbeltos nazarenos iluminaron con devoción la aurora de las silenciosas feligresías de San Clemente y San Esteban. (Hay que recordar que la iluminación nocturna daroaliana es muy escasa. Solo alumbran las calles faroles de pared de baja potencia -por supuesto con luz blanca- y no existe iluminación exterior para monumentos religiosos ni civiles). Rebosante de gracia, de clasicismo y de barrio (igual que en aquellas películas de los años veinte) llegó la Archicofradía de San Gil con el misterio de la Injusta Sentencia de Nuestro Señor, seguido de su popular centuria romana, y la devotísima Virgen de la Esperanza entronizada en su soberbio paso de palio (sueño del genial Juan Manuel Rodríguez Ojeda), y rodeada, piropeada y acompañada hasta el amanecer por el fervor incondicional de su barrio de San Gil. La Cofradía del Santo Cristo de la Viga y Nuestra Señora de Covadonga salió desde su pequeña capilla del barrio Esmeralda, pasando por calles tan castizas como Salchicha, Paul Newman, Calambre o Coliflor, con sus característicos corrales de vecinos (muchos de ellos adaptados en antíguos palacios y conventos) especialmente alumbrados con faroles y velas.

En la imagen una fotografía del misterio de la Sentencia del Señor, (obra de Morales Nieto -1654- y judíos, pilato, sirviente y soldados de Cristóbal Pérez -1681- y Emilio Pizarro -1898-), sobre paso realizado por José Vicente Hernández y José Ríos en 1859, a su vuelta al populoso barrio de San Gil en la mañana del pasado Viernes Santo.

domingo, 1 de mayo de 2011

CRÓNICA DE LA SEMANA SANTA DE DAROAL 2011 (II); Una vez destaponada la carrera oficial el Jueves Santo por la mañana y, tras el rápido discurrir de las hermandades reducidas del Domingo de Ramos, Lunes, Martes y Miércoles Santo (que se produjo a toda marcha, nada que ver con el lucimiento gratuito y absurdo de la "semana santa de pago" que se produce en otras ciudades a su llegada al recorrido oficial, alentado, inventado, encabezado y manipulado por el "charopadillismo" de turno and company), quedó libre el paso para las señeras cofradías del Jueves Santo por el incomparable marco urbano daroaliano que, por fortuna, tampoco tiene nada que ver con esas horribles retransmisiones televisivas donde se ven las procesiones de otros lugares, en medio de espantosas calles o plazas antiestéticamente iluminadas. Abrió el día el Santo Cristo de la Púrpura (obra de Montes de Oca h.1730) con su gran clámide de terciopelo bordada en oro, seguido de la Virgen de la Misericordia (de autor anónimo atribuida a Blas Molner h.1761) acompañada de San Juan y acompañada por la prestigiosa Banda de Música de los Mosqueteros del Rey, que interpretó solemnes marchas fúnebres. Emocionante como siempre fue el discurrir del imponente misterio de Jesús ante el Tribunal de Caifás (Cristo de autor anónimo del siglo XVIII y sayones y sacerdote de José Palao Marco, de 1852) por la empinada Cuesta de Debla en su subida hacia San Mateo. Del mismo modo lució el misterio del Huerto de la Cofradía de la Encrucijada (Cristo de autor anónimo del siglo XIX, atribuido a Luján Pérez y apóstoles y ángel atribuidos a José Rodríguez de la Oliva, siglo XVIII) por las angostas callejuelas de la judería de San Vicente. El portentoso paso de la Virgen de Pompeya (obra de Alonso Álvarez Albarrán de 1629) presentó un exótico exorno floral de piñas multicolor, que conjugaban de maravilla con los ricos bordados de las hermanas Antúnez (siglo XIX) e hizo las delicias de los cofrades daroalianos. Digno broche para tan solemne día lo pusieron las antíguas e ilustres hermandades de la Flagelación (Cristo de Gregorio Fernández h.1619 y misterio de Antonio de Ribera y Francisco Díez de Tudanca h. 1650) y Nuestra Señora de África (de autor anónimo del siglo XVIII, atribuida a Francisco María Galeano) desde la iglesia de San Lorenzo. Siempre acompañada por el "peculiar" gentío de su barrio Esmeralda la Archicofradía de la Condena y Nuestra Señora de las Batallas, que por supuesto se saltó a la torera todos los controles horarios establecidos por el Síndico, y que congregó a miles de fieles para presenciar el acto de la Humillación con la Hermandad de la Sentencia, en el costumbrista marco del Campo de la Aduana Vieja con sus trasnochadas tascas rebosantes de flamenco y saeta. Y por último la Archicofradía de Nazarenos del Cristo de la Humillación (obra de Salvador Carmona 1760) y Nuestra Señora del Desconsuelo con San Juan. que desfiló con gran elegancia bajo su palio de Rodríguez Ojeda de 1902, por las señoriales calles del viejo barrio de San Marcos (Corral Quemado, Leona, Paso del Baño, Amparo, etc.), al son de las solemnes marchas de procesión que interpretó la Banda de Música del Sagrado Lavatorio . En la imagen una fotografía del paso del Santo Crucifijo de San Agustín (obra de autor anónimo de la primera mitad del siglo XIV), que durante todo el recorrido llevó tras de sí una extraordinaria legión de fervientes devotos, y fue acompañado de la famosa Virgen de Pompeya.