sábado, 31 de enero de 2009

RETRATOS DAROALIANOS XVIII; Maribel de Triana.
Mediante una publicidad radiofónica supimos de los espectáculos nocturnos de una sala llamada "Califa", que se situaba en la zona de la Florida. Un buen día decidimos ir y allí nos encontramos con el fascinante mundo del transformismo. La popular Esmeralda de Sevilla encabezaba el show al frente de un nutrido grupo de artistas en el que figuraban: Soraya de Triana, Koki Blú, Candela 93 (igual que el proyecto Cartuja), las Suggar (que imitaban a las "Azúcar Moreno), Lola Clavel (imitadora de Lola Flores) y Maribel de Triana, anunciada como la doble de Isabel Pantoja. A partir de ahí quedamos absolutamente encandilados y fueron muchos los viernes y sábados que íbamos al Califa a tragarnos los dos pases del espectáculo y, aunque aquel lugar era como una gran familia (siempre éramos los mismos) y nos moríamos de ganas, nunca llegamos a entablar amistad con ninguna de ellas.
Sería un tiempo más tarde, a raíz de la publicación en El Correo de Andalucía de un artículo sobre nuestra exposición fotográfica "Mamá quiero ser artista", cuando Maribel supo de nosotros fijándose en una foto en la que aparecíamos Francisco y yo posando ante la imagen de la Patrona de Daroal (que fue lo que realmente le interesó). Y en un espectáculo de la sala "La Copla" de Dos Hermanas, se nos presentó (a Francisco a Antonio y a mi) iniciando así una discreta y después intensa relación que con el tiempo habría de cambiar el rumbo de la historia de Daroal.
Pronto conoció a las tres hermandades existentes por entonces (Paloma, Caridad y Reyes) y naturalmente nosotros a las suyas (Consolación y Victoria), estableciéndose entre nosotros una total complicidad pues en ese tema de las "pequeñas hermandades" hablábamos el mismo idioma. Durante el tiempo que duró un viaje realizado a Madrid junto a la artista Charo Reina (con quien trabajaba de asistenta personal), nos confió la restauración de su Virgen de Consolación, lo que supuso su ingreso definitivo y el pistoletazo de salida para una nueva etapa de las cofradías daroalianas.
Gracias a su buen hacer en la costura, las vírgenes multiplicaron su ajuar (sobre todo Paloma, a quien veneró desde el principio), los cambios de ropa se efectuaban cada quince días (poco más o menos), nacieron las famosas "promociones" con infinidad de reportajes fotográficos y estampitas, los tocados, los encajes, las telas crecían sin control. Conocimos a su abuela Consuelo (la mejor cocinera de Triana), su peculiar casa de la calle Castilla (donde pasamos momentos inolvidables y para sí los quisiera el programa "Cuarto Milenio"), su amigo Javi de San Juan "la Chuchi" (punto y aparte), la Juani, la Ivana y el Lolo, Pepe el de Morón, la moto, la cámara de vídeo (con quien casi dormía), las corrosiones (nuestras ensaladas), los "pinitos", la Pantoja, la O, etc, etc, etc...
Fue de pronto un revolucionario vendaval que se antojaba irresistible al tiempo que chocante para el sector más conservador de la Daroal "antígua". Su fuerte y arrolladora personalidad provocaba a la vez admiración y rechazo (igual que ocurre hoy) y, a pesar de su indudable atractivo, no todos los daroalianos comulgaban con sus formas y su rotunda presencia en los eventos.
Maribel de Triana se convirtió además en el puente decisivo para una nueva y numerosa generación de daroalianos, a través del cual ingresaron (unos conducidos por otros): la "Chuchi" con la hermandad de Belén, la hermandad de "la Bomba" y la del Cristo de la Corona, la del Rocío, la de Peligros, la del Traspaso, "la Turca", la de Angustias, la del Príncipe, la de Agüita, y algunos que no tuvieron hermandad.
Daroal iniciaba una nueva e intensa aventura repleta de cultos, romerías, excursiones, pregones, cabildos, etc. Comenzaba el esplendor.
Podríamos decir que Daroal deslumbró a Maribel y Maribel a Daroal, aunque entre destellos también surgieron algunas sombras que posteriormente cobrarían fuerza. Todo lo concerniente a Maribel iba acompañado casi siempre de la polémica, su pregón de la Semana Santa en 2001 fue un buen ejemplo y, en un grupo de tanta gente en el que cada vez costaba más, digamos que Maribel con su actitud no contribuía precisamente a mantener la unidad. Aunque es bien cierto que ella no era la única.
Cuando los frentes se hicieron claramente visibles y Daroal era ya un puro campo de batalla, la corona empleó todo su esfuerzo por no dar la espalda a nadie y, si bien por separado, con Maribel ha continuado manteniendo una robusta y especial relación que dura felizmente hasta el día de hoy.
Duquesa de Triana, Presidenta de la Real Cofradía de los Azotes y Nuestra Señora de Consolación, revolucionaria, desbordante, impulsiva, impulsora, innovadora, enérgica, apasionada, controvertida, generosa, inventora de gran parte del "vocabulario" daroaliano y de la primitiva, genuina y mas letal saga de "hermanas"...La imitadora mas imitada. Daroaliana indiscutible. El ecuador de la historia de nuestra ciudad...
Todo eso ha significado y significa Maribel para nosotros. Su entrada no dejó indiferente a nadie y, sin duda, contribuyó al levantamiento de aquella ciudad imaginaria que crecía hasta límites impensables y se convertía en referente directo para aquellos anónimos y maravillados ojos, ya clavados en nuestro cada vez mas atractivo mundo de Daroal.
En la imagen, una fotografía de Maribel de Triana realizada por el Duque de la Frontera en 1999.

2 comentarios:

ENCAJES-ANTIGUOS dijo...

MARIBEL ES UNA ESTRELLA, QUE NO DEJA INDIFERENTE A NADIE, LOS QUE LA CONOCEN,LO SABEN MARCA UN ANTES Y UN DESPUES DE CONOCERLA.

Carlos dijo...

Guapísima. Excelente persona. Imprescindible, a pesar de aquellos a quienes les pesa. Única. Maribel.